1.5 /5
Évaluation
★
★
Llevo años viniendo y me da pena lo que he vivido este año. Lo peor es que nos intenten engañar. Una caída importante de calidad. Un restaurante no puede vivir solo del local y del servicio, a un restaurante se va a comer. Como algo sé del tema, confirmo que la materia prima no era fresca como nos dijeron, y solo la ensalada (un 10) escapó. Navajas recomendadaS, limpias pero diminutas. Gamba roja (que no lo era) congelados y con la carne pegada a la piel, y un mero, que nos cobraron 50 euros para dos, que no creo que tuviese talla mínima y que aliñan con un ajo seco y vinagre?? Salsa bilbaína, dicen. Pobre animal que murió para ese maltrato en cocina. Una pena, porque los empleados correctisimos y en entorno brutal. Carlos, sé que lo vas a leer. Corrige que estás a tiempo, cuida a los clientes fijos y no vendas lo que no se puede vender.