El lugar es impresionante en todos los aspectos lo mires por donde lo mires, presentación de los platos espectacular, personal de cocina poniendole mimo y esmero a cada plato que sale de sus manos, calidad de los productos y el gerente del bar (Pepín) junto con los camareros (Samuel y Ramón) te accogen y te hacen sentir como en casa, te dan un trato personalizado y con mucho amor y cariño. Sitio super recomendable si venís a Grazalema.
Hemos comido genial. La sopa Grazalema riquísima. La carne de venado la.pedí sin ganas y no me gustó. Y es que yo en realidad quería el huevo con pisto. En fin. Tarta de 3 chocolates muy buena que pedí porque no les.quedaban natillas caseras. Ains. Los camareros muy majos. Hay muchos carteles graciosos que se leen desde la.barra. Quizá demasiados carteles graciosos
Enclavado en el centro del pueblo. Sitio donde parar a tomar algo. Las tapas muy buenas. El servicio muy amable pero desbordado por la afluencia de gente. Se quedan sin tapas por lo que tuvimos que modificar en dos ocasiones lo pedido. Bien.
Sitio perfecto para tomar algo. Muy ricos el chorizo picante con miel y el medallón de solomillo (quemado por abajo) y la salsa a la pimienta era de sobre. El flamenquín con queso rulo de cabra muy rico.
Lugar céntrico y siempre lleno de gente. Comes en todo el centro del pueblo. Esta vez solo tomamos un refresco, pero se come muy bien. Muy recomendable