5 /5
Évaluation
★
★
★
★
★
Si hubiera 10 estrellas, ¡se las pondría! Llegamos después de 2 horas de negativas en bares de la Mezquita y Ribera. Negativas, además, sin filtrar el estrés propio del puente del Pilar (cordosiesismo a tope). Y cuál fue nuestra sorpresa, que aunque tenían la Taberna llena, nos atendieron SÚPERAMABLEMENTE los camareros. Estaban a tope pero su atención fue exquisita: simpáticos, nos explicaron los platos estupendamente. ¡Qué sitio más chulo! Comimos unos rollitos de pato con base de patata exquisitos. El arroz negro está para ponerle un piso. Los postres, una delicia. Había estado en la Boca con amigos pero esta vez fui con mi madre y nos encantó el trato. Repetiremos en el restaurante o en l...