2.5 /5
Évaluation
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No conocía este restaurant a pesar de tenerlo cerca de casa. Estaba buscando algún lugar nuevo por la zona y me lo recomendaron un vecinos. Fuimos 2 parejas hace 2 sábados. Al llegar nos informaron que había un corte de luz eléctrica por la zona, pero que sólo unos pocos platos de la carta no estarían disponibles. Así que decidimos quedarnos. Al entrar al comedor nos encantó que a pesar de no haber electricidad la luz natural era estupenda. Y allí comenzó el festín de cosas ricas. Me encantan los lugares que te reciben con un aperitivo, nos sacaron unos txupitos de crema de calabaza con unos mini rollitos de primavera para chuparse los dedos. Para empezar y compartir pedimos una sopa de pescado, unas almejas en salsa verde y unas Zamburiñas a la plancha a las cuales no tuve tiempo ni de hacerle foto. Todo estupendo. De segundo cada uno pidió un plato: Rabo deshuesado, Solomillo al foie, Magret de pato y Bacalao con 3 salsas, todos de 10. Y de postre: Tarta de queso con frutos del bosque y una Torrija. La atención impecable y cercana. Sin duda volveremos a Las Palmeras.